Atención como si fuera tu abuela

Anfitriona amable y cariñosa. Habitación amplia y limpia.Buena ubicación cerca de restaurantes, panadería y supermercado.Ducha con buena presión de agua

No tengo ninguna queja.

Nos alojamos en un albergue en Caldas De Reis y quedamos encantados con la amplitud y comodidad del edificio. Nuestra habitación era espaciosa, con un gran balcón y ventanas que ofrecían mucha luz natural. Además, teníamos un baño privado, televisión y microondas, lo cual fue muy conveniente. También contábamos con acceso a una lavadora y secadora, así como una cocina completa. La ubicación del albergue era excelente y encontramos una deliciosa panadería debajo donde disfrutamos de una empanada de bacalao increíble.

La única desventaja fue que el albergue no ofrecía mucha privacidad, ya que compartíamos la habitación con otras personas. Además, el ruido de la calle y el servicio de limpieza temprano en la mañana fueron un poco perturbadores.

Me encantó mi experiencia en esta hospedería. Lo mejor fue la cama súper cómoda, perfecta para descansar después de un largo día. Además, la ubicación era genial, muy cerca de todo lo que quería visitar. También me gustó que tenían una lavadora y secadora disponibles por tan solo 2€ cada una, lo cual fue muy conveniente, especialmente si estás haciendo el Camino de Santiago.

En cuanto a las cosas que no me gustaron, las almohadas de la habitación no eran nada cómodas, estaban llenas de trocitos de esponja. Creo que sería bueno que las cambiaran por unas almohadas más clásicas.

El albergue Agarimo está muy bien situado y es una parada imprescindible para conocer el espíritu del Camino de Santiago. La atención de Carmen y su familia es maravillosa, te hacen sentir parte de su familia y se preocupan de que no te falte de nada. Las habitaciones están limpias y cuidadas, y tienes acceso a una zona para hacer la colada y preparar tu comida. Aunque el albergue no es propiamente un albergue, sino una casa particular, se agradece que las habitaciones no sean compartidas para tener más intimidad. Además, las camas son cómodas y amplias. En general, recomendaría este lugar.

Hay algunos aspectos negativos. El ruido de la calle puede ser molesto, ya que el albergue está ubicado junto a una carretera con mucho tráfico.

la ubicación, las habitaciones amplias y limpias, los baños disponibles en todo momento, la cocina equipada con lavadora y secadora, el personal muy amable.

Nada que decir.

Trato amable y ayuda constante. Habitación cómoda con bonitos muebles antiguos. Sin ruidos. Buena ubicación y posibilidad de guardar bicicletas. Lavadora y secadora disponibles. Amplias habitaciones con camas cómodas. Gran balcón y ventanas. Agradecidos.

Lo único que no nos gustó fueron las camas, que eran antiguas e incómodas, con almohadas desgastadas y un colchón que se clavaba todo. Esto afectó un poco nuestro descanso, pero en general, el resto de la estancia fue muy agradable y satisfactoria.

Trato amable, habitación cómoda con muebles estilo antiguo, camas confortables, flexibilidad horaria, servicio de lavadora y secadora gratis, buena ubicación.

Todo está bien.

La dueña espectacular, excelente atención, ubicación genial, nos sentimos como en casa, lavandería gratuita.

Nada, es perfecto.

Me encantó el trato amable del personal, siempre dispuestos a ayudar. Las habitaciones estaban muy limpias y cómodas, con todas las facilidades que necesitábamos. Además, la ubicación era perfecta, muy cerca de los puntos de interés de la ciudad. disfrutamos de una cocina bien equipada y de la posibilidad de lavar nuestra ropa en las instalaciones.

El ruido del tráfico exterior fue un inconveniente ocasional durante nuestra estancia.

Hola, somos una pareja de peregrinos de Almendralejo, Extremadura. Estuvimos hospedados en el Albergue Agarimo durante nuestro camino de peregrinación y fue una experiencia maravillosa. El albergue está ubicado en una zona perfecta, cerca del centro del pueblo con fácil acceso a la iglesia, supermercado, farmacia y varias pastelerías. La habitación era espaciosa y las camas muy cómodas. Todo estaba impecablemente limpio. Además, había dos baños disponibles, uno con ducha y otro con bañera, por lo que nunca tuvimos que esperar. La cocina estaba bien equipada y contaba con lavadora y secadora, incluso nos proporcionaron detergente. Pero lo mejor de todo fue la amabilidad y hospitalidad de Mari Carmen, la dueña. Nos hizo sentir como en casa y nos lavó nuestra ropa en su lavadora. Sin duda, un albergue muy recomendable.

De verdad que lo recomiendo.

Súper limpio, personal amable, secadora y lavadora gratis, ascensor, toallas.

Me gustó todo.

Mi estancia en Albergue Agarimo fue genial, estuve allí por una noche y fue perfecto para mi propósito de viaje. Carmen, la casera, fue muy amable y me dio recomendaciones de lugares para visitar. La habitación estaba limpia y cómoda, y además tenía acceso a servicios como lavandería y una terraza con vistas fantásticas y tranquilas. Agradezco también que las habitaciones no sean compartidas, aunque la intimidad era un poco limitada debido a las tabiquerías.

Os recomiendo este fantástico lugar.

Propietaria amable con lavadora y secadora disponibles, gratis. Buena ubicación y ambiente acogedor, con restaurant cercano. Gran atención y limpieza.

La dueña del albergue fue extremadamente amable y hospitalaria. Nos permitió ingresar a la habitación antes de la hora y nos recomendó varios lugares para visitar y comer. La habitación era amplia, con un baño grande y limpio, equipado con secador de pelo. Nos sentimos como si estuviéramos en la casa de nuestra abuela en el pueblo, pero sin el alboroto de los primos pequeños. Definitivamente volveremos a hospedarnos aquí.

Nada 😊